Densitometría Ósea
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Una técnica sencilla y eficaz para conocer el estado de los huesos
La Densitometría es una prueba que nos permite conocer la densidad mineral de los huesos, es decir, la cantidad de calcio que contienen, y compararla con los valores normales.
Esto nos permite detectar enfermedades como la osteopenia y la osteoporosis de forma precoz, y evaluar el riesgo de fracturas. También nos sirve para conocer la respuesta del organismo a posibles tratamientos que se hayan prescrito previamente.
¿Cómo se realiza la prueba?
La prueba suele realizarse sobre un único hueso, normalmente de la cadera o las vértebras inferiores. En algunos casos puntuales puede hacerse en todo el cuerpo.
Pare el paciente, el transcurso de la prueba es muy similar a tomarse una radiografía, pero en este caso se utiliza una pequeñísima cantidad de radiación ionizante.
Suele durar muy poco tiempo, alrededor de un cuarto de hora como máximo, es indolora y no invasiva, y no requiere ingreso.
¿En qué casos está indicada esta prueba?
En el caso de todas las personas mayores de 65 años.
Mujeres que hayan entrado en la menopausia y que no consuman estrógenos.
Mujeres postmenopáusicas que fumen o hayan fumado a lo largo de su vida.
Mujeres que hayan alcanzado la menopausia y que midan más de 1,70 m. o pesen menos de 56 kg.
Personas de ambos sexos que sufran o hayan sufrido enfermedades asociadas a la pérdida ósea o fracturas de cadera o tengan antecedentes familiares de dichas fracturas.
Personas que utilicen medicamentos que se conoce que provocan pérdida de masa ósea.
Personas que sufran diabetes de tipo 1, enfermedad hepática, renal o en la tiroides o paratiroides.
Personas con antecedentes familiares de osteoporosis.
Personas que hayan sufrido una fractura después de un golpe no demasiado fuerte.
Niños que presenten enfermedades genéticas que afectan a la formación del hueso.